Quincy Jones, un gigante de la música: un legado perdurable
Quincy Jones, legendario productor musical, compositor y multiinstrumentista, falleció a la edad de 91 años. Su impacto en la música contemporánea abarca más de siete décadas y múltiples géneros, desde el jazz hasta el pop y el hip-hop. Su familia, en un comunicado, expresó su tristeza por la pérdida de un padre y un hermano, reconociendo la inmensa vida que Jones vivió y celebrando la imposibilidad de encontrar a alguien como él.
Jones es uno de los iconos más aclamados de la industria musical, con un récord de 80 nominaciones al Grammy y 28 victorias, incluyendo tres premios al Productor del Año y dos premios a Álbum del Año y Canción del Año. Su última victoria llegó en 2019 con el documental semi-autobiográfico “Quincy”, escrito y co-dirigido por su hija Rashida Jones, que ganó el premio al Mejor Documental Musical.
Como productor y arreglista, Jones fue responsable de algunos de los discos más definitivos del siglo XX. Produjo el éxito de Michael Jackson de 1982 “Thriller”, que sigue siendo el álbum más vendido de todos los tiempos, así como su igualmente exitoso “Bad” de 1987. Colaboró con los mejores talentos de todas las épocas, incluyendo a Dizzy Gillespie, Aretha Franklin, Ray Charles, Rufus & Chaka Khan y Al Jarreau, y también dirigió éxitos en géneros como “It’s My Party” de Lesley Gore, la versión de Frank Sinatra de “Fly Me to the Moon (In Other Words)” y “Strawberry Letter 23” de The Brothers Johnson.
A lo largo de su extensa carrera, Jones demostró ser un pionero e innovador, fusionando géneros y colaborando con artistas de diferentes estilos. Su legado se extiende más allá de la música, incluyendo su trabajo en la industria cinematográfica y televisiva. Su impacto en la cultura es innegable, y su música seguirá resonando en generaciones futuras.