En 1991, Guns N’ Roses inició un reinado de dos semanas en el número 1 de las listas de álbumes de Estados Unidos con ‘Use Your Illusion II’. Este logro fue solo una parte de un evento sin precedentes en la historia del rock: el lanzamiento simultáneo de dos álbumes dobles, Use Your Illusion I y II, el 17 de septiembre de ese año.
Fue el acto más audaz y grandilocuente de la que era, en ese momento, la banda más grande y peligrosa del planeta. Tras el éxito cataclísmico de Appetite for Destruction, la banda respondió a la presión no con un disco, sino con una obra épica de 30 canciones repartidas en dos lanzamientos que debutaron en los puestos #1 y #2 de Billboard.
El Lado Más Oscuro, Político y Melancólico
Mientras que Use Your Illusion I se inclinaba hacia el hard rock más directo, el Volumen II se considera a menudo la mitad más oscura, compleja y experimental del proyecto. Este álbum contenía algunas de las composiciones más ambiciosas de la banda, explorando temas políticos y mostrando una faceta más melancólica.
Es en este disco donde se encuentran himnos inmortales como:
- “Civil War”: Una épica de casi ocho minutos que es una de las declaraciones antibélicas más potentes del rock.
- “You Could Be Mine”: El potente tema principal de la película Terminator 2: Judgment Day, que los consolidó como íconos globales.
- Su icónica versión de “Knockin’ on Heaven’s Door” de Bob Dylan.
- La segunda parte de su trilogía de baladas, “Estranged”.
Un Legado de Exceso y Genialidad
Los álbumes Use Your Illusion representan la cima del exceso y la ambición de Guns N’ Roses. Fueron grabados en un período de caos interno, pero también de una creatividad desbordante. El hecho de que una banda de hard rock se atreviera a lanzar baladas de piano de nueve minutos, épicas con orquestas y temas con una carga política tan fuerte, era una prueba de su poder y su negativa a seguir las reglas.Hoy, 34 años después, Use Your Illusion II sigue siendo un testamento de una era en la que las bandas de rock no tenían miedo de ser grandiosas, complejas y, a veces, gloriosamente excesivas.
