¿Quedan a 90 segundos del apocalipsis?
El Reloj del Juicio Final, también conocido como Reloj del Apocalipsis, fue creado en 1947 por el Bulletin of the Atomic Scientists con el objetivo de informar a la humanidad sobre la cercanía de una posible destrucción total debido a la amenaza de una guerra nuclear. Sin embargo, desde 2007 su función se ha ampliado para advertir también de otros eventos catastróficos que podrían acabar con la vida en el planeta.
La analogía utilizada por el reloj es el tiempo que falta para la medianoche, donde las 00:00 horas representan el fin. En el momento de su creación, el reloj estaba a las 23:53, a tan solo siete minutos del apocalipsis. A lo largo de los años, el reloj ha ido avanzando cada vez más cerca de la medianoche.
En 2017, el reloj se encontraba a las 23:57, y en 2018 marcaba las 23:57:30. Un año después, fue posicionado en las 23:58, y en 2024, por segundo año consecutivo, está a 90 segundos del desastre. Esto se debe a diversas razones, como la posible escalada nuclear por la invasión rusa de Ucrania, la crisis climática con el año más caluroso registrado y los peligros de la Inteligencia Artificial.
El Bulletin of the Atomic Scientists advierte que las tendencias actuales apuntan hacia una catástrofe global. Por un lado, los países que poseen armas nucleares están ampliando y mejorando sus arsenales, creando una amenaza de una nueva carrera armamentista. Por otro lado, los desastres naturales, como inundaciones masivas e incendios, continúan ocurriendo sin que se tomen acciones significativas para combatir el cambio climático.
La situación actual es peor que la de 1953, durante la Guerra Fría, cuando el reloj marcó dos minutos para la medianoche. En ese momento, tanto los soviéticos como los estadounidenses estaban realizando pruebas con armas termonucleares. El punto más alejado del desastre fue en 1991, cuando el reloj estaba a 17 minutos de la medianoche tras el fin de la Guerra Fría.
El Bulletin of the Atomic Scientists, fundado en 1945, tiene como objetivo alertar al mundo sobre el peligro de una catástrofe nuclear. Ha contado con la participación de destacados científicos como Albert Einstein y Robert Oppenheimer. El reloj del juicio final es una forma visual y simbólica de recordar a la humanidad la importancia de trabajar hacia un mundo más seguro y sostenible.