Michael J. Fox abusó del alcohol para sobrellevar el diagnóstico de Parkinson
Michael J. Fox ha revelado que usó alcohol para hacer frente inicialmente a su diagnóstico de Parkinson. El actor inicialmente fue diagnosticado con el trastorno degenerativo a principios de la década de 1990, aunque no lo reveló públicamente hasta 1998.
La vida de la estrella es el tema del nuevo documental, Still: A Michael J. Fox Movie, que acaba de estrenarse en el Festival de Cine de Sundance y lo muestra hablando sobre su diagnóstico.
En la película, recordó que tomó pastillas de dopamina “como Halloween Smarties” para evitar los primeros síntomas de la afección, y siempre sostenía accesorios en el set para ocultar sus temblores.
Al recordar el temor por su pronóstico, Fox revela que comenzó a beber y explica: “No sabía lo que estaba pasando. No sabía lo que venía. Entonces, ¿qué pasaría si sólo pudiera tomar cuatro copas de vino y tal vez un trago? Definitivamente era alcohólico”, agrega, aunque revela que ahora “ha pasado 30 años sin beber”.
Fox admitió que su esposa y sus hijos lo ayudaron a estar sobrio.