La hija de Meat Loaf, recuerda al artista fallecido
Amanda Aday, la hija de Meat Loaf, recuerda al rockero ganador del Grammy como un músico apasionado y padre. Aday, de 41 años, dijo que que su difunto padre era un “hombre complejo con mucha pasión, que llevaba el corazón en la mano” durante toda su vida.
Aday y Pearl “vivieron una vida muy dicotómica” como hijas de la estrella de rock, que saltó a la fama con su exitoso disco de 1977 Bat Out of Hell. Aday recuerda haber recorrido estadios, haber crecido en autobuses de gira “y haber tenido todas estas experiencias increíbles” mientras viajaban con su padre por todo el mundo. Sin embargo, cuando regresaban a casa, “era su hogar y él era solo papá”, dice ella. “Él ya no era Meat Loaf”.
Cuando Meat Loaf no estaba trabajando, participaba activamente en la vida de sus hijos, desde dirigir obras de teatro escolares hasta entrenar a sus equipos de softball. Era en gran medida un padre típico fuera de su personalidad pública, según Aday.
Meat Loaf inicialmente evitó encajar en el molde de la vida, agrega Aday. “Al crecer, cuando éramos pequeñas, él siempre decía que nunca quería estar a la moda“, explica. “Pearl y yo queríamos un nuevo par de zapatos o algo así, lo que sea que esté de moda, en cuanto a moda o lo que sea, y él siempre decía: ‘No estés a la moda. No seas moderno. Sé genial, porque es genial” Y ese era él”.
Aday revela que tanto ella como Pearl se apresuraron a ir a Nashville para estar con su padre después de recibir una llamada informándoles que su salud “estaba empeorando, más rápido de lo esperado. Tan pronto como pudimos, nos acercamos a su cama en el hospital, nos sentamos con él y le tomamos la mano”, recuerda Aday, y agrega que está “muy agradecida” de que tanto ella como su hermana hayan tenido la oportunidad de ver a su padre antes de morir.Meat Loaf estuvo rodeado por algunos de sus amigos más cercanos poco antes de morir, con personas que volaban desde todo el país para verlo por última vez, dice Aday.