Cómo el soundtrack de Romeo + Juliet cambió la forma en que escuchamos música en el cine
En 1996, Baz Luhrmann no solo reinventó la tragedia de Shakespeare con un Leonardo DiCaprio que nos robó el aliento. También revolucionó el papel de la música en el cine con un soundtrack que se volvió tan icónico como la propia película. Romeo + Juliet no fue solo una historia de amor trágico… fue una revolución musical que aún se siente en las películas actuales.
Pop, alternativo y pasión: una mezcla explosiva para los 90
Antes de Romeo + Juliet, los soundtracks solían ser colecciones de score clásico o temas pop pegados al final. Pero esta peli mezcló escenas dramáticas con tracks de Radiohead, Garbage, The Cardigans y Des’ree, dándole a cada momento un peso emocional y estético que conectaba directo con una nueva generación.
El amor adolescente nunca sonó tan profundo
¿Recuerdas esa escena de Leo y Claire Danes viéndose por primera vez a través del acuario con Kissing You de fondo? Imposible no sentir mariposas. Cada canción se usó como un personaje más, narrando lo que los protagonistas no decían con palabras.
Un soundtrack tan poderoso que vivió más allá del cine
El álbum vendió millones de copias en todo el mundo, se convirtió en oro y platino en varios países, y ayudó a posicionar a bandas como The Cardigans o a revivir el hype por Radiohead. Incluso hoy, muchos fans descubren esta peli por la música.
Cambió las reglas para siempre
Gracias a este soundtrack, los estudios empezaron a buscar curadurías musicales más atrevidas y significativas. Pelis como Moulin Rouge! (del mismo Luhrmann) o Twilight siguieron esta fórmula: usar canciones pop para intensificar las emociones y hablarle a una audiencia joven.